Francisco Domingo Guillen, vecino de Almenara, era un joven sin dificultades físicas y además deportista. Un día de tantos, que salía a correr, empezó a notar dificultades y dolor en sus pies y piernas, tenía 33 años.
También nos cuenta hasta dónde puede llegar una persona desesperada para tomar la decisión de desaparecer de este mundo, pero su decisión no fue efectiva.
Si escucháis la entrevista oiréis momentos difíciles, sentimientos fuertes, alegría, autoestima, sentido de superación,…
Ahora, una silla de ruedas, son las piernas de Francisco Domingo Guillen. Pero es feliz, su cara de felicidad lo dice todo. Además es un ejemplo de superación para la sociedad.
ENTREVISTA A FRANCISCO DOMINGO