J.V.M.- Quartell
Un nuevo «rogle» ha sido instalado junto al altar mayor del templo de santa Ana de Quartell, la pasada semana, con lo cual volverán a oírse los sones de este tradicional instrumento que ensalza las festividades más relevantes del culto católico durante el año.
El rogle consiste en una rueda o círculo, generalmente de madera, dotado de una docena de pequeñas campanitas, y al ser volteado, expande los sones por la nave del templo, para resaltar los momentos litúrgicos más cruciales, como el canto del Gloria en la Navidad y en la Pascua, o en la festividad del Corpus o de la exposición mayor de la Eucaristía, o al inicio de las ceremonias más solemnes.
Este instrumento campanil ha sido donado a la parroquia por una familia de esta localidad de Quartell.
Históricamente, el rogle ha sido muy preponderante y peculiar en los templos de los territorios históricos de la antigua Corona de Aragón, y sigue su uso, con normalidad, por ejemplo en la catedral o la basílica de la Virgen, en Valencia.
El templo de Quartell, salvo con alguna excepción, ha permanecido medio siglo sin tener un rogle, puesto que el anterior fue desmantelado a principios de la década de los años 1960, por la primera reforma del presbiterio del templo, hasta llegar a este mes de agosto, en el que ha sido fabricado por una empresa de relojes públicos campanas monumentales de Náquera. Curiosamente, ha sido dotado de once campanitas y el correspondiente cordón para impulsar el volteo, instalado frente a la puerta de acceso a la sacristía del templo.