J.V.M.-Quartell
La festividad de santa Ana, celebrada en Quartell el pasado domingo, clausuró las fiestas patronales de este año 2019, tras una semana de intensos festejos.
La jornada acogió, a mediodía, la misa solemne, cantada en latín por la coral polifónica de la Unión Musical, y celebrada por el cura párroco, Guillermo Carrasco, quien resaltó en la homilía que «hace tres siglos y medio que la comunidad cristiana de Quartell decidió nombrar a santa Ana como la patrona titular de la parroquia, y dicha devoción se ha ido trasmitiendo, de generación en generación, hasta nuestros días».
Al anochecer, se realizó la procesión general, precedida por la cruz parroquial, en donde desfilaron las imágenes de los Santos de la Piedra, Abdón y Senén, que por tradición son los patronos del municipio de Quartell, y seguidamente, a las 21 horas, salió del templo a la plaza de España la imagen de la patrona santa Ana, acompañada por el clero parroquial, una comisión de los jóvenes festeros y clavarios de este año y más de un centenar de feligreses, junto con la banda de música local, que recorrieron el centro urbano, a cuyo paso muchos vecinos encendieron las luces de las fachadas de sus domicilios y abrieron las puertas de sus casas. Al término de la procesión, el cura párroco dio las gracias a todos los participantes y también al ayuntamiento por su colaboración; y anunció que, próximamente, se programarán unos actos religiosos, tras el verano, para conmemorar que este año se cumplen los tres siglos y medio desde la terminación del templo parroquial.
El final de fiestas lo culminó un apoteósico castillo de fuegos artificiales, como rige la tradición más ancestral.